¿Qué es y para qué sirve el Mail Marketing?
¿El email marketing no funciona en las pymes?
Es una pregunta que muchos empresarios o emprendedores se formulan, cuando empiezan a utilizar dicha herramienta de marketing.
¿Qué es el email marketing?
Básicamente consiste en el envío masivo de correos comerciales o informativos, con el objetivo de mejorar la fidelidad de nuestros clientes o potenciales clientes, a la par de afianzar nuestra imagen de marca, con el fin de conseguir un mayor número de conversiones (pueden ser ventas, suscripciones, venta cruzada etc.)
El email marketing suena muy bien
Suena bien ¿verdad?, claro tú le cuentas estas ventajas al emprendedor, por norma general, persona joven que sabe de la necesidad de la utilización de estrategias en varios frentes, para que su empresa llegue a “buen puerto” e inmediatamente le empiezan a surgir ideas del tipo; un amigo del primo de mi cuñado, dice que conoce a uno que maneja un montón de listas de email con 5000 suscriptores, quiero que el email sea como los de Groupon, haremos envíos todos los días, porque si es tan bueno, lo bueno 2 veces bueno mejor ¿no?, el diseño no te preocupes, mi sobrino maneja el Photoshop etc.
Bien, no hace falta decir que entre ideas disparatas, conceptos mal entendidos y refranes mal enunciados, normalmente esto del email marketing termina mal, y surge la pregunta que se formula en el título de este artículo.
Entonces, ¿Qué hacemos para que funcione el email marketing? Para que funcione, hay que tener en cuenta 4 aspectos fundamentales como son:
– La comunicación: Si tu negocio es de pompas fúnebres, no vas a realizar una comunicación informal o divertida, quizás me he ido a un ejemplo muy extremo, pero muchas veces se entiende mejor así. Hay que tener en mente cuál es tu negocio y cuál es tu público objetivo, por lo que nada de copiar lo que hacen los de Groupon o similares.
– El diseño: Aquí vamos a tirar de refrán, “una imagen vale más que mil palabras”. Para que algo “llegue” al usuario a parte de una correcta comunicación, tiene que tener un perfecto diseño para que “entre por los ojos”, hoy en día la imagen de empresa es uno de los aspectos más importante en los negocios, así que nada de sobrinos que saben de Photoshop.
– La configuración: El envío tiene que hacerse, o bien a clientes que ya hayan comprado, o bien a clientes que se hayan suscrito o hayan preguntado por el producto, en resumen, se le envían a personas que han mostrado interés por el producto, porque si se lo enviamos a desconocidos, solo lograremos desconfianza y mala imagen (spammers). Así que nada de comprar listas de 5000 suscriptores de “alta calidad”.
– Medición: Aquí el consejo radica en pruebas, pruebas y más pruebas, hay que conocer a qué hora tus clientes son más propensos a abrir su correo, qué mensajes tienen mejor aceptación según los clicks que se hagan, comprobar que se vea bien en el móvil, que todas los links estén correctamente enlazados, comprobar el nivel de aceptación de envíos de mails al mes, así que nada de cuantos más emails envíe mejor. Por suerte hoy en día servicios como Mailchimp o Getresponse, te permiten comprobar todos estos parámetros y más.
Teniendo siempre esto en mente, tus probabilidades de éxito en tus campañas de email marketing irán en aumento, y como último consejo, siempre en caso de duda, buscar ayuda en profesionales del sector.
Autor: Alejandro Jaime